Hace algunas semanas tuve la oportunidad de asistir a una capacitación con Élder M. Russell Ballard, miembro del Quórum de los Doce, en Tegucigalpa, Honduras.
Ha sido una experiencia inolvidable para mi y ha cambiado mi vida para bien. Estoy agradecido a Dios por tener líderes especiales en la Iglesia.
Un día después de esa reunión estaba leyendo mis apuntes y meditando sobre lo que aprendí, y decidí leer las Escrituras, y encontré un versículo muy famoso:
"Porque el hombre natural es enemigo de Dios..."
¿Un enemigo de Dios? ¿Quién desea ser enemigo de Dios?, pero, ¿Qué es un hombre natural?
La Guía de Estudio de las Escrituras define hombre natural así:
La persona que se deja influir por las pasiones, los deseos, apetitos
y sentidos de la carne en lugar de escuchar la inspiración del Santo Espíritu.
Claro está que a diario tenemos una lucha entre nuestro cuerpo carnal contra nuestro espíritu, decidiendo quién es el que gobierna nuestra vida, nuestro cuerpo terrenal tiene deseos y apetitos que nos llevan a pecar y nos impiden acercarnos a Dios.
Talvez al leer ese versículo pensemos en pecados "graves", pero a diaro tenemosque luchar con pequeñas cosas que pueden convertirse en grandes.
Por ejemplo el dormir es algo bueno pero cuando abusamos nos convertimos en hombres naturales, llegamos tarde a la Iglesia, no asistimos a Seminario, etc.
Hermanos cuidémonos y seamos dispuestos de seguir cumpliendo con nuestros convenios hechos con NuestroPadre Celestial.
Les quiere,
Obispo Pineda.
